Los obreros, que trabajan en la construcción de la planta coquizadora, iniciaron desde ayer una protesta por explotación laboral y hoy lo continuaron, denunciaron jornadas laborales de más de 10 horas diarias sin pagos de horas extras así como los “míseros” salarios que reciben y las condiciones “infrahumanas” en que laboran.

Los obreros también repudian a “corruptos” líderes sindicales locales que les quitan hasta 500 pesos mensuales de “cuota”, a quienes advierten que “correrán” si se presentan para “mediar” con la parte patronal y solucionar el conflicto.
Al grito de “¡ya basta de esclavitud!”, piden que la titular de la Secretaria de Energía, Rocío Nahle, informe al presidente Andrés Manuel López Obrador, como lo hace todos los lunes en las conferencias “mañaneras”, que en la construcción de la refinería de Pemex, “también hay protestas por la explotación salarial” a la que los tienen sometidos.
Fuente : proceso.